lunes, 16 de diciembre de 2013

MANIFIESTO “EMISIÓN SIN VOZ” POR BERNARDO ÁNGEL SALDARRIAGA



Diciembre 4 de 2013
Vivo entre las nadas y las hostias

Es imposible matar lo breve,

lo aleve,

lo leve.

Me repongo de cada incursión

Soy dios, soy diablo

De cualquier tiempo me agarro

Tan Humano que semejo

un rastrillo en ascenso,

un reflujo en suspenso

Avanzo y me circundo

Soy profundo, profuso

Recorro los bosques inexactos

¡Qué substratos!

Lo digo todo en el preciso instante

en que decaigo.

Con el Teatro he subido y he bajado

Severo en los asuntos,

llevo gafas de ciruelo.

Me pronuncio en cuanto duele

Me digito en resistencias

Tengo lo que no debería tener

Me soslayan impudicias vacilantes

¿Qué siente un actor

a la hora de saltar a escena?

¡Qué se comprenda todo,

que se cierre el cerco,

que se infiera bello todavía,

a pesar del circo eterno!

De él la no vida

Que se sepa divino siempre

Elegido para algo aquí en la tierra

Que no se asombre de profanar su cuerpo,

de entregarse en los retomes.

Escribir que acecha desde el fauno

Puedo cambiar de un momento a otro,

pero sigo siendo el mismo.

Me aquilato

Me achico

Me profiero arrecho y santifico

Cada vez que repaso estos manifiestos,

me digo:

son así, no hay otra manera de sentirlos,

de exponerlos.

Sudan su espesor de reconditeces

Abren al pasado y al presente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario