Julio 30 de 2013
Entrando en el tiempo…
gira per se…
En la calle hablaremos de esto…
Lenguaje del cuerpo, ya lo sé…
Fronda de inmensidades
Los personajes son ascendientes…
devienen en sí…
La Calle abre…la calle habla…
La calle contiene las historias…
las preparatorias…
En la calle, un actor no titubea
La calle: un presentir de todo…
Afirmar y negar es su cuenta
Cuerpo entregado, palabras regadas,
gestos recibidos….
Intacto nadie queda
¿Promisorio quién, después de todo?
Viéndonos así, sabemos
El cuerpo en la calle es átomo restituido
Intacto no queda el tiempo
Lo mayor y menor no cuenta
Un actor que allí se enciende, es pleno,
perfecto y sereno,
alerta tremebundo,
no pertenece a la cárcel del yo…
La vestimenta es la corporeidad,
la angustia y el amor.
¡Tomad y comed, este es nuestro cuerpo….
silente, alucinante, en trance de verse…!
Lo de antes, lo de ahora, es ya.
Teatro abierto, comunicación en el tiempo…
con ternura, rabia y desacato.
Los actores tocan arrebato….
Mover la Historia, sacudir la idea,
perforar la gigante ilusión…
Arder en la llama suprema de la necesidad,
de la convicción eternal
¿Quién más cuenta?
Lo certero, lo profundo,
la gravitación del acto con mayor riesgo
No remendamos la nada
No hacemos lo mismo del mimo
Somos inicuos, distintos, prestos y leves,
el uno en el otro.
Esta es nuestra propuesta de sentir y vida,
lesión de cerebro iconoclasta
¡PERPLEJOS YA!
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